Los detectives salvajes

febrero – marzo 2022

La frase del escritor argentino Andrés Neuman parece una broma, pero nada más alejado de la socarronería: «Roberto Bolaño fue un chileno que escribió la gran novela mexicana viviendo en Cataluña».

Entre 1968 y 1977, Bolaño dejó los pies y la pluma fatigando la Ciudad de México; fundó y rompió un movimiento poético (el infrarrealismo); se enamoró y palideció ante el desengaño tanto de una mujer como de una causa política; y se convenció de que, como sentencia uno de sus personajes, «el secreto de la vida no está en los libros».

Todo eso le sirvió para escribir Los detectives salvajes (1998), una de las novelas más importantes, divertidas, conmovedoras y proteicas de las últimas décadas en cualquier idioma.

Las personas que asistieron a este taller de «Libro abierto» entendieron la importancia de Los detectives salvajes no solo para la literatura de Bolaño, sino para las letras de habla hispana en general.